En una operación a gran escala contra presuntos islamistas radicales en varias regiones de la convulsa región del Cáucaso Norte, las fuerzas de seguridad rusas aseguraron hoy haber matado a 49 terroristas y detenido a 30. Otros 20 hombres se entregaron a las autoridades, aseguró hoy el comité antiterrorista en Moscú, citado por la agencia de noticias Interfax.
Sin embargo, las autoridades no detallaron cuánto duró la acción llevada a cabo sobre todo en las repúblicas federadas de Daguestán, a más de 1.000 kilómetros al sur de Moscú, y Nalchik, la principal ciudad de Kabardino-Balkaria, de mayoría musulmana.
El presidente ruso, Vladimir Putin, abogó por una acción más dura contra los extremistas. En una vivienda en Nalchik, las fuerzas especiales de los servicios secretos internos FSB y del Ministerio del Interior mataron a al menos cuatro supuestos terroristas, responsables de varios asesinatos de jueces y policías, según la información.
En otra intervención en Daguestán cayeron cinco extremistas que también cometieron numerosos atentados, según las autoridades rusas. En total se destruyeron decenas de campamentos terroristas y se encontraron más de 100 armas y cientos de minas, granadas y explosivos, así como 19.000 balas. Los enfrentamientos entre la policía y los radicales islámicos que buscan establecer un estado independiente son comunes en el Cáucaso.
Sin embargo, las autoridades no detallaron cuánto duró la acción llevada a cabo sobre todo en las repúblicas federadas de Daguestán, a más de 1.000 kilómetros al sur de Moscú, y Nalchik, la principal ciudad de Kabardino-Balkaria, de mayoría musulmana.
El presidente ruso, Vladimir Putin, abogó por una acción más dura contra los extremistas. En una vivienda en Nalchik, las fuerzas especiales de los servicios secretos internos FSB y del Ministerio del Interior mataron a al menos cuatro supuestos terroristas, responsables de varios asesinatos de jueces y policías, según la información.
En otra intervención en Daguestán cayeron cinco extremistas que también cometieron numerosos atentados, según las autoridades rusas. En total se destruyeron decenas de campamentos terroristas y se encontraron más de 100 armas y cientos de minas, granadas y explosivos, así como 19.000 balas. Los enfrentamientos entre la policía y los radicales islámicos que buscan establecer un estado independiente son comunes en el Cáucaso.
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