lunes, 30 de enero de 2012

Dictador de Siria no quiere soltar la teta: ahora dilata con Rusia.

El régimen sirio de Bashar al Assad ha aceptado la invitación para negociar con la oposición en Moscú con el fin de lograr un arreglo político del conflicto en el país árabe sin injerencia exterior, según ha informado este lunes la Cancillería rusa. «Ya hemos recibido una respuesta positiva por parte de las autoridades sirias. Esperamos que la oposición también de su visto bueno en los próximos días, poniendo los intereses del pueblo sirio por encima de cualquier otra consideración», explica la nota oficial.
Rusia subraya que el Gobierno sirio y la oposición «deben enviar a sus representantes a Moscú en unos plazos consensuados por ambas partes para la celebración de contactos informales sin condiciones previas». La nota insiste en que los representantes sirios podrán abordar cualquier asunto sin limitación de ninguna clase, incluido el inicio del diálogo nacional propuesto por la Liga Árabe. «La inmediata celebración de esos contactos en Moscú es urgentemente necesaria para cesar cualquier violencia en Siria e impedir la desintegración sangrienta y la confrontación en la sociedad», apunta el comunicado del Gobierno ruso.
Representantes del Consejo Nacional Sirio (CNS), que agrupa a la mayoría de la oposición en el exilio, confirmaron que han recibido la invitación. «El CNS ha recibido la propuesta. En estos momentos, la está estudiando», han señalado a la agencia Interfax fuentes del Consejo, que han advertido de que la postura rusa durante el conflicto puede repercutir en la decisión del CNS de declinar la invitación. «El CNS espera que Rusia dé pasos positivos en el apoyo de las iniciativas de la Liga Árabe y de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. Esperamos que Rusia acceda a las demandas del pueblo sirio y deje de apoyar a Assad», añadió.
Otro miembro de la oposición, citado por la agencia Reuters, aseguró que no habían recibido la propuesta y que, en caso de que ésta llegue, la rechazarán por ser «un intento de influenciar al Consejo de Seguridad de la ONU». «Nuestra postura no ha cambiado y es la de que no habrá diálogo con el presidente Al Assad», explicó a la agencia Abdel Baset Seda, militante del CNS.
Fuente. elmundo.es

No hay comentarios:

Publicar un comentario